Monday, June 28, 2010

Chisasibi: El Norte del Norte Parte I

A partir del trópico de Cáncer y si avanzas hacia el norte, las temperaturas se vuelven cada vez más frías. Recuerdo aquellas noches de invierno cuando hablaba por teléfono con mis familiares del centro de la república mexicana- ¡Has de estar pasando unos fríos por allá! - Me decían, año con año, cuando el termómetro en Monterrey (Norte de México) marcaba 5 grados, mientros ellos gozaban de unos deliciosos 18 grados.

Para los mexicanos, yo era el de las tierras frías. Sin embargo despúes de haber ido al norte de mi norte (San José, California) y despúes de haberme movido al norte de aquél norte (Montréal, Québec) y despúes de haber hecho el viaje hacia el punto más al norte que mis pies han pisado (Chisasibi, Québec), mi "paradigma nórdico" ha sufrido varias transformaciones.

Hace un par de días, unos amigos y yo, tomamos la ruta de la Bahía de James. Esa que te lleva a lo largo de esa entrada de mar, que comienza al terminar la Bahía de Hudson y que termina en el Kilómetro 0, cerca del pueblo de Chisasibi. Através de la ruta, el hombre puede penetrar la Taiga con un coche. Más allá de Chisasibi, se extiende la Tundra, cuyos pueblitos son accesibles solamente através de Jet o Helicóptero.


Chisasibi es uno de los 9 pueblos de los Indios Cree, la civilación que habitaba éstas tierras antes de llegada de los europeos. Éstos pueblos eran nómadas, pero han empezado a asentarse. El pueblo de Chisasibi tiene solamente 28 años. Antes los Cree habitaban el Forte George, una isla que se encuentra a unos minutos del actual pueblo. La relocación fué debido a la erosión de la isla, que fué una de las repercusiones al medio causada por la puesta en marcha de una de las plantas hidroeléctricas más grandes del mundo.

¿Cómo viven los Cree en la nueva ciudad de Chisasibi? He aquí imágenes de sus casas, edificios, calles y sobretodo, su gente.


Una niña cree nos dió la bienvenida, mostrándonos su lengua, para despúes regalarnos una sonrisa.


Es imposible no poner los ojos sobre el cielo de éstas regiones. En el se dibujan colores y figuras fascinantes. Queríamos cazar alguna aurora boreal. No tuvimos esa suerte, pero el cielo se mostró generoso con sus formaciones de nubes.


A pesar de estar ya demasiado al estilo de America del Norte, los Cree conservan parte de su patrimonio. Todavía construyen tipis, en las que llevan a cabo algunas de sus ceremonias o simplemente cocinan mientras crean un ambiente de privacidad para los suyos a la hora de la cena.


Las viviendas tienen su encanto y color



Como puede verse, uno de los símbolos más importantes de los Cree, es el Tipi. Aquí puede verse como un gran Tipi ha sido integrado, como parte de la arquitectura de uno de los edificios públicos del centro del pueblo: El Centro Comunitario.


Diversos tipos de rocas pueden ser encontrados en Chisasibi.




La combinación de las casitas, sobre la planicie, los pinos pequeños, y el gran cielo abierto ponen al turista en un estado de contemplación, estado quizás "natural", para muchos de los que habitan ahí.


Los Cree eran y siguen siendo cazadores. Entre los animales que cazan están los caribúes, los gansos y los alces.




Los perros de Chisasibi no tienen la misma actitud defensiva que los perros de las ciudades grandes. Éstos se muestran amistosos desde un inicio. Quizás en estas tierras donde hay grandes espacios, el sentido de la territorialidad se diluye un poco.

Pude ver a su gente trabajar y disfrutar de sus ratos de ocio con dos porterías, patines y palos de golf.

El gran río que pasa por Chisasibi, es quien le ha otorgado parte de su identidad. A la orilla de éste, los Cree tienen sus canoas, acomadas en una fila, listas para ser usadas durante el verano, para la pesca.


Su lengua es el Cree pero también hablan algo de inglés y de francés.


Se escuchan pájaros entonar otro tipo de melodías, la puesta del sol dura 3 horas, uno se siente como un extraño entre la sobrepoblación de pinos, las noches de verano son cortas, muy cortas y el aire frío como ventizca polar, no deja de soplar, en el Norte del país situado más al Norte de América del Norte.

-Victor Velásquez


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